Hacer que la creatividad fluya en nosotros es absolutamente necesario. Un emprendedor con poca o nada de creatividad la tendrá difícil porque ella será la fiel compañera que siempre será necesaria.
La vida sin creatividad puede resultar muy vacía. El humano necesita de nuevas ideas, de motivaciones fuertes, de más y mejores pensamiento que les plantee retos para encontrar la forma de resolverlos.
Creatividad no significa dibujar bonito, se trata más sobre cómo resuelve diferentes problemas haciendo uso para ello de las ideas y herramientas más innovadoras.
Deja que tu creatividad fluya
No existe una fórmula mágica que sirva para hacer que nuestra creatividad fluya. Aunque estos hábitos que te comparto a continuación te ayudarán muchísimo.
Haz mapa mentales
Nuestro cerebro piensa mejor cuando descompones una idea en un mapa mental. Hacerlos, te permitirán ver «la gran pintura» de forma más clara al descomponer el pensamiento más complejo en pequeño fragmentos manejables.
Todo lo que se torne difícil en tu vida, desglósalo en un mapa mental, es con esta herramienta con la que tu creatividad se irá retroalimentando a tal punto de ofrecerte las soluciones más innovadoras.
Lee y mucho
Lo digo mucho pero es una verdad absoluta. Leer te da muchas nociones y respuestas ante cualquier problema que se te pueda presentar. Leer es el alimento predilecto de la creatividad.
Y no lo digo por copiar ideas de otros, la lectura regular alimenta mucho la imaginación y una mete nutrida es una herramienta poderosa que hará palidecer cualquier problema que se te pueda presentar.
Haz colaboraciones
Amén a nuestra definición como individuos, pero cuando colaboramos con otros en el desarrollo de nuevas ideas nos enfrentamos al reto de crear situaciones complejas que requerirán soluciones muy astutas.
Y para hacerlo será necesario nuestra creatividad que indudablemente fluirá por compartir criterios con otros.
Medita, viaja
Cuando tu mente esté tan dispersa, meditar te ayudará a centrarla. Y si eso no es suficiente, hazlo mientra viajas. Meditar y viajar alimentará tu alma, tu espíritu emprendedor y a su vez, tu creatividad, esa que creías dormida pero que solo necesitaba un empujón con mucha fuerza para salir y hacerte brillar.
Busca experimentar nuevas cosas
Hacer lo mismo siempre no trae buenos resultados. Cuando sales de esa zona de confort te sentirás mucho más motivado para enfrentar nuevos retos y oportunidades.
No digas no si no lo haz intentado. Ve y toma las riendas de los retos que se te presente. Tú tienes una capacidad casi inagotable para idear soluciones creativas y definitivas.
Aléjate de las distracciones
Una mente distraída difícilmente podrá crear ideas creativas. La genialidad no admite soluciones básicas y cuando ellas se presentan, cualquier problema se puede volver un verdadero dolor de cabeza.
Cuando sientas que las distracciones merman tu productividad, busca forma de contenerlas y enfócate en tus deberes.
Ten un hobby
No todo es trabajo y cuando sientas que estás al tope de algo, es momento de drenar y distraerte. Aunque claro, esto no lo debes hacer solo cuando llegues a esas condiciones extremas.
Mantener un hobby te hará más dinámico y liberará a tu mente y cuerpo del estrés diario. Practica algún deporte, disfruta de algunas maratones en Netflix, aunque no te excedas. Sal de excursión, ve a la playa, o cualquier otra actividad que sea de tu interés y te ayude en tu desarrollo creativo.
Practica el sexo
Sí, este es el hábito más interesante y que debes tenerlo sí o sí en tu vida. No incito a ninguna práctica poco saludable, solo te motivo a tener intimidad con la persona que mejor te llene.
Tener sexo libera mucha endorfina, la famosa hormona de la felicidad que te hará sentir precisamente eso, mucha felicidad y cuando uno es feliz, la creatividad fluye como río embravecido.
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